Mollymook Golf Club Hilltop Course

Con 18 hoyos rodeados de amplias vistas de matorrales, el campo está idealmente situado para escuchar el sonido de las olas rompiendo contra la prístina playa de Mollymook. Con calles sinuosas y greens ondulados, las colinas suponen una dura prueba para cualquier golfista, pero independientemente de las condiciones de juego, se puede disfrutar de paseos y tranquilidad, junto con una abundante flora y fauna autóctonas.

Las calles son un reto en cuanto a precisión y distancia. Los greenes también suponen un reto, ya que son grandes y ondulados. Puede que aún quede mucho golf por jugar una vez que se pise la superficie de putting. Diseñado en 1977, el campo presenta obstáculos de agua como arroyos y presas, así como bunkers moderados.

Entre los hoyos más destacados de esta estrecha y arbolada calle en lo alto de una colina se encuentran el 7, de 324 metros, que se curva a la izquierda desde un arroyo que cruza la calle, y el 9, de 178 metros, que lleva la mitad exterior de vuelta a la modesta casa club. En los últimos nueve hoyos, dos pares 3 (el 12, de 178 metros, y el 17, de 172 metros) tienen arroyos, aunque aquí sólo se mojarán los golpes de salida mal dados.